Encerio. 10

Capitulo contado por Daniel*
Pasaron 3 largas semanas en el hospital, desde que el doctor Morris dijo que debian tenerme bajo observacion durante un tiempo ya que las radiografias habian revelado que la costilla rota me habia perforado peligrosamente y que eso era lo que me provocaba ese ardor en el abdomen que me mantenia despierto durante toda la noche, aparte del dolor tambien era una molestia tener que ir en silla de ruedas a todas partes, y con todas partes me refiero al bano nada mas, el doctor Morris decia que debia evitar hacer muchos esfuerzos del pecho para abajo.
Los dias eran aburridos desde que se acababa la hora de la visita a las 10 pm hasta que terminaban las horas de clases a las 1 pm, era entonces cuando mi dulce nina pecosa aparecia para alegrarme el dia asi fuera trayendome un libro, comida chatarra o solo su presencia, me era suficiente.
Ella venia cada dia para asegurarse de que estaba bien y traerme las tareas, luego ambos haciamos los deberes ayudandonos mutuamente finalmente pasabamos toda la tarde hablando. Ella lograba cuidar de mi mejor que cualquier enfermera del hospital una sola de sus sonrisas me hacia sentir mucho mejor que las mil pastillas que me recetaba el doctor Morris diariamente, Dios mio la amaba tanto! Desde el dia en que la conoci esa noche lluviosa, tal vez fui algo rudo con ella al principio,pero cuando me desperte por completo y me di cuenta de el angel que tenia ante mi, lamente ese error, incluso aun lo lamento. Esa carita no merecia una expresion tan triste y yo haria lo que fuera para mejorar eso, y hasta ahora lo estaba haciendo bien.
Esa manana no fue la excepcion la puerta se abrio para dejar entrar a mi pelucha pecosa, estaba mas hermosa que nunca, llevaba un pantalon blue jean bastante ajustado que dejaba a la vista las hermosas curvas de sus piernas, una camisa de mangas largas de estilo indu abombada color azul con un cinturon marron que se le veia despampanante, y llevaba el cabello recogido en una elegante cola de caballo, y una cascada de cabellos dorados con reflejos color madera caian despreocuoadamente hasta sus caderas.
-Hola – su voz retumbo en mis oidos como el canto de un angel
-Hola – le devolvi el saludo
-Como se ha sentido un mi pelucho – el apodo se habia vuelto mas comun entre nosotros
-Bien pero como siempre me siento mejor cuando tu estas conmigo – me lanzo una sonrisa cautivadora
-Te traigo buenas noticias
-Que paso?
-El doctor Morris dice que ya puedes empezar a desplazarte en muletas
-Eso quiere decir que ya mu puedo largar de aquí?
-No aun no – mi emocion se desvanecio – pero falta poco – me devolvio el animo como solo ella sabia hacerlo
-Que me traes hoy?
-Te traigo poca tarea y musica – Saco el disco de paramore (Riot) ella sabia lo que me gustaba
-Perfecta combinacion – Volvio a sonreir de esa manera encantadora que me erizaba toda la piel
Se saparo de mi un momento y puso el cd en la radio que mi padre me habia traido para que me distrayera en mi estancia en el hospital, luego saco mis libros de geografia y matematica y mis libretas de estas mismas materias, luego saco sus cuadernos tambien.
-Que tenemos hoy en matematica? – pregunte
-Pagina 184 actividades 4 y 5 a,b y c – asenti
Empezamos a hacer nuestras tareas en silencio, de vez en cuando le lanzaba ligeras miradas solo para encontrarme una hermosa vision concentrada en su cuaderno. Aveces me hacia preguntarme si ella sentia por mi lo que yo sentia por ella estaba casi seguro de que talvez yo era un simple romance de jovenes mientras que ella era para mi el amor de mi vida, aunque de un modo egoista me parecia bien siempre que pudiera probar un poco de la escencia de sus labios, cuando estaba a su lado lo unico que queria era tenerla lo mas cerca posible para protegerla de cualquier peligro, incluso estaba feliz de que esta estupidez del hospital me estuviera sucediendo a mi pero si le estuviera sucediendo a ella no me lo perdonaria jamas.
-Termine te falta mucho? – me pregunto
-No, ya termine tambien – el disco llego a su fin y ella se apresuro a remplazarlo por uno de linkin park, luego me quito los libros de encima finalmente se sento a mi lado
-No te gusta estar aquí verdad?
-Para nada – le respondi
-Estoy segura de que caminar un poco te hara mejor
-Como vo… - antes de que pudiera formular la pregunta me respondio
-Ya veras… esperame ya vengo
Segui sus oredenes me levante un poco con las manos para quedar sentado, y espere a ver que sorpresa me traia, dentro de poco llego con una enfermera, la mujer traia con ella unas muletas, y enseguida comprendi y se me dibujo una sonrisa en el rostro
-A donde vamos? – pregunte
-A practicar – respondio ella
Entre las dos mujeres me ayudaron a sentarme con las piernas fuera de la cama, lo primero que senti fue el agudo pinchazo en el abdomen, luego un rapido alivio que me era ya familiar y luego el ardor, Rebecca lo noto
-Estas bien, podemos parar si quieres? – Sonrei cuando me dijo, porque ella estaba mas preocupada por mi salud que yo
-Estoy bien continuemos
Esta vez di un impulso para pararme y la enfermera me sustuvo de pie, el ardor se hizo aun mas intenso pero esta vez senti algo mas, una extrana presion en las piernas, por el largo tiempo sin caminar suponia yo.
-Aquí tienes – Rebecca me entego las muletas, las tome y me mantuve parado solo por un momento sin decir nada y sin moverme, y me senti de nuevo independiente
-Listo vamonos – le hice senas para salir
-Necesitan que los acompane? – Se ofrecio la enfermera
-No gracias estamos bien
-De acuerdo avisenme si necesitan ayuda
Di mis primeros pasos hacia la independencia, haciendo fuerza entre mis piernas y brazos a un paso mas lento que el de los ancianos y me senti apenado de que Rebecca tuviera que mantenerse a mi ritmo, sin embargo a ella parecia no importarle en lo absoluto, se veia mas bien fascinada por mis avances.
Adende vamos? – pregunte acariciando la esperanza de que fuera a algun sitio lejos del hospital
-Ya veras – No era exactamente la respuesta que esperaba
Seguimos caminando en silencio hasta llegar a un sitio que se veia muy bien alumbrado casi como si estuviera en el exterior.
-Cierra los ojos – me pidio
-Me gustaria hacerlo pero me da miedo que vaya a caerme – dije buscando una excusa para arruinar la sorpresa
-Por favor – las esmeraldas de sus ojos me atravesaron, cerre los ojos
-De acuerdo – exclamo con voz triunfadora – ahora camina con cuidado
Segui sus instrucciones hasta que una luz ilumino mis parpados convirtiendo la oscuridad en un ligero rojizo si no hubiera sido por la poca probabilidad hubiera pensado que estaba en el exterior y que esa luz era el sol mismo
-Ok abrelos – Abri mis ojos y descubri que la poca probabilidad no habia vuelto mis ilusiones imposibles, Nos encontramos en un jardin al descubierto lo bastante grande como para sentirme libre, me di media vuelta y descubri que el hospital seguia estando a mis espaldas
-Como es esto posible? – le pregunte aun confundido
-Bueno muy pocos hospitales tienen parques para que sus pacientes caminen pero descubri que este era uno de esos pocos
-Eres lo mejor que me ha pasado! – me encamine hacia ella acelerando un poco mi paso pero una de las muletas se atasco en un hoyo, Rebecca me sostuvo por debajo de los brazos antes de que cayera al suelo, dejandonos en una posicion un poco comprometedora
-Pasa tu brazo por encima de mis hombros – me indico, en esa posicion pude oler la fragancia que desprendian las cataratas de sus cabellos, apoyandome un poco en ella camine hacia unos bancos cercanos, luego de que me sente, busco las muletas y se sento junto a mi – Es buen momento para un descanso – dijo mirando la puesta de sol
-Es lo segundo mas hermoso del mundo – dije intentando hacer un cumplido
-Correccion es lo mas hermoso del mundo
-No mas que tu – me miro y sin decirnos nada, ambos supimos que era momento de un beso – Me gustas – dije despues de nuestros labios se despegaron
-Tu tambien me gustas – lanzo un suspiro de infelicidad
-Que pasa, por que esa cara
-No se si esto sea seguro
-No porque, todo fue culpa del hoyosi la muleta no se hubiera atascado entonces… - no me dejo terminar
-No me refiero a eso, me refiero a tu y yo juntos, no puedo dejar de pensar en lo de Madam Berut
-Crei que ya lo habiamos hablado
-Si pero… - al parecer cambio de opinion – Sabes que tienes razon – Paso sus brazos por detrás de mi espalda y por encima de mi abdomen evitando mis heridas, y yo le pase mi brazo por encima de los hombros manteniendola lo mas cerca de mi posible – Te quiero Daniel, encerio – susurro.
Cerre los ojos, estando alli con ella no me importaba perderme el mas bello de los atardeceres, mirarla a ella todos los dias era mucho mejor que eso, no necesitaba caminar por mi solo cuando sabia que ella seria mi muleta mientras estuvieramos juntos, no me importaba perder todo lo que tenia con tal de que ella no se marchara, La amaba mas de lo que un joven inmaduro hubiera podido amar a una de sus mil novias…
-Yo mas... encerio

Ame ese momento. 9

-QUE ALGUIEN HAGA ALGO!! – Grite de nuevo, pero esta vez Armando salio del shock y corrio hacia donde estabamos yo y el cuerpo inerte de Daniel, tomo su mano y empezo a palpar la muneca.
-Tiene pulso, tenemos que llamar a una ambulancia – Lo admire por un momento, ya que fue el unico que supo que hacer
-QUE ALGUIEN LLAME A UNA AMBULANCIA!! – Grite con la esperanza de que alguien mas aparte de Armando saliera del shock e hiciera algo.
-Yo lo hare!! – respondio Cristina visiblemente nerviosa – Demonios no puedo marcar!! - Corri hacia donde estaba ella y pude ver como sus dedos resbalaban de las teclas del celular, seguramente por su nerviosismo
-Damelo a mi!! – Dijo Alex despues de haberle arrebatado el telefono, marco rapido un numero y se puso a la espera, despues de lo que a mi me parecio una eternidad Alex fue atendido – Emergencias necesito que manden una ambulancia – hizo una pausa – Mi primo fue arroyado por un auto – Otra pausa esta vez un poco mas corta – Centro comercial Neo centro, entrada norte – luego de esto le devolvio el telefono a Cristina – vienen en camino…
Cristina y yo intercambiamos miradas, estando conscientes de que las predicciones de Madam Berut se estaban haciendo realidad, incluso mas rapido de lo que yo esperaba, y eso me desesperaba aun mas , pero sin embargo habia un pequeño rayito de esperanza que me quedaba, tal vez esto no incluyera en las predicciones de madam Berut …
Armando seguia con Daniel haciendo no se que, pero suponia que estaba tomandole el pulso de pronto note que no estaba solo habia un senor a su lado ayudandolo lo reconoci como el conductor que habia arrollado a Daniel, Alex abrazaba a Cristina visiblemente nerviosa, tarde un poco en captar que estaba llorando y yo de pronto senti que queria llorar pero las lagrimas simplemente no salian, quise tener a Daniel a mi lado para abrazarlo y ese pensamiento hizo que se me olvidara lo que sucedia por un momento. Finalmente tras lo que me parecio un tiempo interminable la ambulancia llego.
Las personas actuaron rapido no preguntaron lo que habia sucedido, ni quienes eran los familiares, solo subieron a Daniel en una camilla y lo metieron a la ambulancia.
-DOS FAMILIARES QUE VENGAN CON MIGO!! – Grito uno de los paramedicos
-Alex tu y Cristina vayan a casa y cuentenle a mis tios (los padres de Daniel) lo que paso toma las llaves – luego se dirigio a mi – vamos Rebecca
Subimos rapidamente a la ambulancia, era la primera vez que subia a una y no era realmente una experiencia que me hubiera gustado vivir sin embargo preferia estar alli que con Cristina y Alex asi por lo menos yo seria la primera en enterarme si algo sucedia, fuera bueno o malo. Despues de haber conectado a Daniel a unos aparatos nos quedamos en silencio total lo unico que se escuchaba era el sonido de los aparatos y la aparatosa respiracion de Daniel , despues de unos minutos me atrevi a preguntar.
-Va a estar bien? – el joven paramedico me miro
-No sabria decirte, tenemos que esperar a que lo vea un medico – No esperaba un respuesta muy diferente asi que me limite a asentir con la cabeza
Finalmente llegamos a la clinica, una vez mas los paramedicos actuaron rapido se llevaron la camilla y tuvimos que correr para alcanzarlos hasta llegar a la puerta de “trauma-shock” desde donde no nos dejaron pasar…
-A partir de aquí no pueden pasar – nos detuvo uno de los paramedicos – el paciente sera atendido por un especialista les avisaremos en caso de que lleguen a haber cambios.
Sin nada mas que hacer nos sentamos en las sillas en silencio a esperar que hubieran cambios ojala buenos.
-Llamare a Cristina – susurro Armando
-Alo Cristina – hizo una pausa – ya llegaron? Como lo tomo mi tia? –Otra pausa – Ok dile que fue ingresado en trauma-shock y lo esta atendiendo un especialista – Pausa – Ok los esperaremos. – Me di cuenta de que era la primera vez que escuchaba a Armando tan desanimado.
El tiempo empezo a pasar y los minutos parecian horas, por un momento pense que quiza ya era de noche pero al asomarme por la ventana descubri que apenas estaba atardeciendo, despues de horas que parecieron anos una cara feliz ilumino el pasillo, era un doctor de cabello canoso, se dirigio a nosotros y la sonrisa en su rostro nos hizo saber que Daniel estaba bien.
-Esta bien doctor? – pregunte alterada
-Si, beba traquila el va estar bien… Por cierto soy el doctor Morris
-Rebecca
-Que ha sucedido doctor? – pregunto Armando
-Bueno tienes una costilla rota y una fisura en un brazo pero es algo bastante superficial comparado con lo que pudo haber pasado…
-Y exactamente doc que pudo haber pasado?
-Bueno si no hubiera sido por que el joven se cubrio la cara con los brazos hubiera sufrido un traumatismo craneoencefalico severo que hubiera causado la muerte –No se que cara debi haber puesto, pero el doctor se paresuro a decir – pero tranquilos tuvo mucha suerte, le pusimos un sedante asi que dormira por un rato pueden pasar a verlo…
El doctor nos guio hasta llegar a un cuarto el “217” y alli estaba durmiendo tenia un algodón en la herida de la frente y unos vendajes en la zona de las costillas, su pecho desnudo hacia que se viera muy guapo, me sacudi mis pensamientos y me sente en una silla a su lado Armando se quedo parado, no se por que pero fue hasta ese entonces que empece a llorar, creo yo que por lo conmocion.
-Ya estamos aquí – anuncio Cristina – Que paso? – pregunto preocupada al verme llorando
- Nada nada, el va a estar bien – le sonrei
-Mi nino, que te ha pasado!! – grito una senora escandalizada, supe que era la madre de Daniel, enseguida el doctor Morris aparecio.
-Usted es su representante? – pregunto a la senora
-Soy su madre
-El va a estar bien senora puede relajarse, fue bastante superficial comparado con lo que pudo haber sucedido
-Ella dejo escapar un suspiro – Gracias a dios, y a usted – El doctor sonrio
-Solo hacia mi trabajo – Mientras tanto yo y los chicos mirabamos a Daniel – Por cierto chicos despertara en un rato
-Mmm tia – se le acerco Cristina a la madre de Daniel – Se que posiblemente no sea el momento adecuado Pero… ella es Rebecca
-Osea que tu eres lo joven que tiene tan enamorado a mi hijo
-Bueno son novios ya es oficial – especifico Cristina
-Pero mirate – dijo tomando mi rostro en sus manos – eres mas guapa de lo que pense
-Gracias – respondi sonrojandome
En ese momento Daniel empezo a abrir los ojos, le hice una sena a Armando de que queria tener un momento a solas con Daniel
-Tia te parece si vamos un rato a la cafeteria, muero de hambre –dijo buscando una excusa para sacar a todos de la habitacion
-Y dejarlo solo?
-No importa yo me quedare a cuidarlo – Dije apoyando la excusa
-Bueno entonces vamos yo tambien muero de hambre
Todos empezaron a salir del el cuarto, Cristina al salir de ultima me gui~o el ojo, ella si habia captado mentira, le sonrei. En ese entonces Daniel ya estaba despegando los parpados, primero abrio un ojo luego otro e hizo un un grunido de dolor mientras se tocaba la frente…
-No te toques alli – dije tomando su mano – tienes una herida
-Hola – me sonrio
-Hola – mis lagrimas volvieron a surgir
-No llores estoy bien
-No, lloro de felicidad…no se estoy nerviosa
-No lo estes – Dijo al mismo tiempo que acaricaba mi mejilla
-Todo esto es mi culpa – Admiti
-Claro que no… yo fui un estupido no mire a ambos lados antes de cruzar la calle
-No fue mi culpa por no contarte lo que paso en la tienda de madam berut… - Asi termine por contarle todo lo que habia pasado -…Y por poco te mueres.
-Rebecca no creas esas cosas, esa mujer no tiene algun don en especial, solo adivino un par de cosas
-Pero… - Daniel no me dejo terminar
-Si ya se que por poco muero pero mira…no mori estoy bien, vivito y coleando! – Nuevamente me hizo reir como solo el podia hacerlo
-Supongo que tienes razon
-Te amo – Sus profundos ojos azules me cautivaron
-Yo tambien te amo.
Fue lo ultimo que le dije antes de que llegaran todos primero su madre que enloquecio de felicidad al verlo despierto luego Armando y Alex para bromear un poco luego Cristina lo felicito, luego el doctor para explicarle su condicion y la suerte que habia tenido.
Asi de pronto el cuarto funebre se habia convertido en el escenario de una fiesta, Ame ese momento…

Madam Berut. (part 2). 8

…Pude ver como las facciones de Cristina su calmaban, por supuesto seguía alterada pero se había calmado – Ahora vamos contigo – dijo la Señora refiriéndose a mi, seguí los pasos que de Cristina y le di mis manos a la señora ella nuevamente cerro los ojos
-mmm… sufriste una perdida hace poco verdad?
-Si… - le respondí suavemente
-Ya veo… Miranda… te quiere mucho sabes se preocupa por ti aun estando del otro lado – me sorprendí cuando dijo eso Miranda… como había adivinado su nombre? Yo todavía no confiaba mucho en lo que la mujer decía aunque había acertado algunas cosas con Cristina esto me había sorprendido demasiado, sentí que debía poner a prueba a la anciana y preguntarle cosas realmente dificiles.
-Y…Que le preocupa – la señora volvió a reírse levemente
-Le preocupa ese nuevo novio que tienes
-Debí imaginarmelo… - Dije hablando para mi adentros, la señora no era una farsante estaba hablando con la verdad, me sentía como si pudiese hablar con Miranda a traves de esta senora asi que debia seguir preguntando –Ella siempre se preocupaba de que los chicos no me hicieran sufrir – el ceno de la senora se fruncio un poco
-No no eso lo que la preocupa
-Entonces que es lo que la preocupa – Vi el ceno de la senora fruncirse cada vez mas, y comenzo a murmurar cosas cada vez mas alto, hasta empezar a gritar, entre algunos de sus ruidos incompresinbles pude entender las palabras, “No!!”, “Alejate de el”, “No lo hagas”, Madam Berut entro en crisis y gritaba cosas mientras se tomaba la cabeza con las manos como si una lucha infernal se desatara en su cabeza, la cajera (Brenda) vino asustada por los gritos a ver que le sucedia a la senora, impactada tanto como nosotras intento hacer algo pero nada funciono de pronto empezo a calmarse lentamente hasta recuperar su estado normal…
-Puedes irte Brenda – dijo entre jadeos
-Que sucedió Madam? – me atrevi a preguntar aun preocupada por el estado de la anciana senora…
-Esto, esto no te va a gustar para nada
-Que sucede?
-Tu tienes un novio verdad?
-Si pero nos hicimos novios hoy mismo
-Pero tu lo amas verdad?
-Si bueno si eso creo
-Y el te ama a ti no?
-Bueno eso creo
-Si – interrumpio cristina – No hay duda de que la ama yo lo conozco desde hace hace tiempo y creame que jamas lo habia visto tan enamorado
-Oh… esto esta mal mal mal – Dijo la Madam hablando para si misma – Mira carino yo se que esto te va a ser dificil de comprender pero la seguridad de tu amor peligra – hizo una pequena pausa pero antes de que pudiera preguntar algo continua – Tu amiga Miranda no debia morir en ese accidente, ella debia haber sobrevivido, volver a casa y por supuesto tu actual novio y tu nunca se habrian conocido, asi que algo lo esta persiguiendo y quiere separarlo de ti
-Pero quien o que lo esta persiguiendo?
-Nadie, no es alguien, es un algo, una fuerza, el destino no lo se pero es algo que los quiere separaros
-Y como pretende seperarnos?
-Hay dos formas…
- Cuales formas?
-Una es una intervencion amorosa, es decir que el o tu fueran atraidos por alguien mas lo que dudo mucho por que se aman demasiado…
-Como puede usted saberlo?
-Creeme querida yo puedo ver cosas que tu no – tenia razon asi que deje de cuestionarla – y cual es la otra manera
-Que uno de ustedes dos muera…y va a ser Daniel – Estaba tan impactada que siquiera me sorprendio el que me dijera su nombre ya que siempre se habia referido a Daniel como mi novio
-Como esta tan segura de que va a ser Daniel
-Por que yo puedo ver tu futuro puedo ver lo que te espera pero en esa persona que tu quieres puedo ver su presente tambien su pasado por no puedo ver su futuro no lo hay – Hiso una larga pausa, se suponia que yo debia decir algo pero no tenia nada que decir, no sabia que decir…
-Creo que sera mejor que nos vayamos ahora… - Se despidio Cristina – Vamos becky
-Adios chicas… Suerte
Cristina y yo decidimos que no le diriamos nada a los chicos para no inquietarlos, aunque lo mas seguro es que no les importara nada lo que habia dicho la adivina preferimos aun asi mantenerlo en secreto…
-Y como les fue? – nos pregunto Daniel al salir
-Bien nos fue muy bien la adivina nos dijo todo el futuro, a mi me dijo que…. – Cristina se habia adentrado en el papel rapidamente, ella era una buena actriz y se veia que podia fingir con facilidad yo en cambio me sentia aturdida por el momento.
Mientras Armando y Alex caminaban con Cristina escuchando el relato, Daniel vino a interrogarme, como ya saben el me conocia demasiado bien como para darse cuenta cuando algo estaba mal
-A ti que tal te fue?
-Bien… ve y escucha a Cristina ella te lo contara todo
-Ok pero estas bien?
-Si si – lo mire a los ojos intentanto reflejar toda la sinceridad posible – todo esta bien – Al parecer el me creyo, y se fue con los chicos a escuchar lo que Cristina estaba contando…
Mientras caminaban delante de mi yo estaba hundida en mis pensamientos, esto no podia ser real, es decir era obvio que Madam Berut sabia lo que hacia me habia dicho tantas cosas que eran ciertas que simplemente no podia pensar que era una farsante, pero eso era una preocupacion mas para mi si estaba en lo cierto en lo demas entonces porque habria, de equivocarse con Daniel, pero de todos modos habia la posibilidad de que se hubiera equivocado y esa era mi esperanza… Daniel no se podia morir!!.
Mientras yo analizaba los pro y los contras de la situacion llegamos a la salida mas cercana a donde estaba nuestro carro, el grupo habia vuelto a dividirse, adelante Daniel, un poco mas atrás Armando, Alex y Cristina y mas atrás yo, Sali por la puerta y apenas me fije de la diferencia de la diferencia entre estar adentro y afuera estaba demasiado concentrada mirando al piso, hasta que de pronto el chirrido de un auto frenando y luego un golpe me saco de mis pensamientos al levantar la vista me encontre con una imagen horrible.
Un auto y un poco mas atrás un joven tirado en el piso al fijarme un poco mas me di cuenta de que era nada mas y nada menos que Daniel, corri para estar mas cerca pero no pude hacer mas nada solo me quede a su lado mirandolo en estado de shock parecia estar dormido pero un pequeño rio de sangre que bajaba por su frente delataba la realidad de los hechos, mire hacia atrás para ver si alguien se disponia a hacer algo pero las demas personas estaban igual que yo… Horrorizados por la frialdad del accidente.
-QUE ALGUIEN HAGA ALGO!! – Grite desesperada pero no hubo respuesta la gente seguia mirando y por un segundo parecio que el tiempo se habia detenido, asi que solamente me quede alli mirando, esperando que alguien hiciera algo ya que estaba fuera de mi alcance el siquiera moverme…

Madam Berut (part 1). 7

Tan dulces, tan suaves, tan… Perfectos definitivamente era la unica manera de describir un beso de Daniel nuestro primer beso habia sido dudoso como esperando cual era la reaccion del otro pero esta vez no nuestras dudas estaban atrás y ahora sabiamos lo que sentia el uno por el otro.
Al terminarse nuestro beso tomo mi rostro en sus manos, ya que el era mas alto que yo tenia que levantar un poco la cara para mirarlo a los ojos, despues de sonreirnos por unos minutos sin decir nada, fue el quien rompio el silencio.
-No puedo creer que esto este pasando
-Yo tampoco – le respondi
-Dios que bonita eres - Si me hubiera sido posible sonrojarme mas en ese momento seguro que lo habria hecho.
Nos volteamos mirando hacia el “publico”, Cristina grababa con su celular, y las demas ersonas que se habian detenido a mirar seguian alli, Daniel le hizo una sena a Cristina que ella vio en la pantalla de su telefono…
-EMM TODOS FUERA AQUÍ NO HAY NADA QUE VER – dijo alejando a los peatones – SIGAN CAMINANDO VAMOS SHU SHU – luego guardo el video, y corrio asia nosotros, detrás de ella venian los chicos
-Bueno Becky (asi habia comenzado a llamarme ella) Welcome to the family – Luego de decir esto me abrazo.
-Gracias primo me dejaste sin novia – bromeo Armando dirigiendose a Daniel, ambos soltaron una pequena carcajada y se dieron un varonil abrazo.
-Lo siento pero no pude evitarlo – le respondio mirando como haciendome un cumplido – Por cierto que hora es?
-Son las… siete y media – le respondio Alex – Y hoy es sabado asi que cierran a las diez, que dicen nos quedamos un rato mas?
-Siiii – Exclamo Cristina mas que todo celebrando en vez de respondiendo…
-Siiii – grito Alex imitando a su novia, luego ambos se rieron y se besaron
Daniel y yo nos miramos de reojo y gritamos Siiii luego tambien nos besamos esta vez fue por supuesto un beso mas corto pero igual de agradable.
-Aja y yo a quien beso – Armando hablaba mas para sus adentros que con nosotros, pero casualmente por detrás de el caminaba una linda chica con una camisa blanca – Besame hermosa – le dijo al mismo tiempo que la detenia tomandola por la mano, ella le respondio con una cachetada… luego se fue – AUCHH!!
- Te gusto?? – Le pregunto Cristina sarcasticamente, mientras Armando seguia sobandose la cara.
-Pues no fue agradable… - Todos nos reimos – Pero tranquila se que en su interior me desea… - Cristina remiro los ojos
-Bueno sigamos caminando – apure al grupo.
Daniel y yo caminabamos uno al lado del otro tomados de la mano, despues de unos minutos me di cuenta de que, desde la muerte de Miranda no habia tenido mas ganas de venir a este mall asi que habia perdido casi toda mi orientacion, yo solo seguia al grupo pero si hubiera estado sola me sentiria totalmente perdida (a lo cual le tengo fobia), Cristina lideraba grupo por supuesto ella se concia cada milimetro del sitio cada tienda cada restaurant cada cosa, Alex y Cristina iban tomados de la mano pero a diferencia de Daniel y yo, pareciera que Cristina corria desesperada por ir a algun lugar y Alex una mascota que la seguia arrastrada, pero ellos parecian felices asi, asi caminamos un largo rato riendonos de algun comentario o manteniendo pequenas y divertidas conversaciones, hasta que llegamos a una tienda…, Debia ser nueva por que yo nunca la habia visto antes, tenia un estilo indio con mallas de colores oscuros y en el interior solo se ilumnaba con gruesas velas, en el vidrio resaltaban unas letras gigantes (Madam Berut) y mas abajo unas letras una poco mas pequenas (Lee las cartas del tarot, pasado, futuro, y mucho mas).
-Rebecca por que no entramos? – me pregunto Cristina entusiasmanda
-Ok vamos, ustedes vienen chicos?
-No las esperamos afuera – respondio Alex por todos
Al entrar en la tienda lo primero que notamos fue que la velas no solo servian para iluminar tambien aromatizaban el sitio, mil olores entrelazados le daban al sitio un perfume extrano pero agradable y al igual que la tienda extravagante, un poco mas adelante como en toda tienda habia un mostrador, con una computadora y una registradora, la chica que atendia se veia distraida seguramente jugando algun juego en la computadora.
-Disculpe podriamos ver a la Senora Madam Berut? – le pregunto Cristina
- Tienen cita? – respondio la chica
-No, no sabiamos que debiamos tener cita…
-Pues deben tenerla, que les parece el martes las 3:30 pm – sugirio la chica con una agenda en la mano – Cristina tomo aire para responderle pero entonces una voz chillona hablo desde un cuarto detrás del mostrador
-Dejalas pasar Brenda
-Madam Berut las atendera – nos dijo la chica abriendonos una pequena puertecilla e indicandonos el cuarto en el que debiamos entrar
-Las estaba esperando – Esa fue la manera en que nos recibio la Senora
A simple vista le calcule unos 60 anos talvez mas, era una senora de tez palida y arrugas abundante su cabello totalmente tenido de canas era rizado y lo tenia muy alborotado como si no se hubiese peinado en meses, se encontraba sentada en una pequena mesa de estilo japones.
-Sientense por favor – Indico con sus mano dos sillas enfrente de ella
-Cristina esto me asusta – le susurre en el oido
-Becky no te asustes es solo una rutina para que parezca mas interesante – Nos sentamos en las sillas entonces la anciana senora continuo.
-Que quieren saber jovenes? – Nos dijo amablamente
-Usted solo haga lo que sabe senora – dijo Cristina respondiendole con una calida sonrisa
-De acuerdo quien va primero?
-Yo porfavor – se apresuro a decir Cristina levantando la mano como si estuviera pidiendo permiso para hablar
-Muy bien dame tus manos preciosa – Despues de estar tomadas de las manos la senora cerro los ojos esperamos unos segundos y empezo a mover su boca como si estuviera hablando pero no podiamos escuchar nada, de vez en cuando murmuraba cosas incomprensibles hasta que de pronto empezo a decir aun con los ojos cerrados - Veo tu futuro… un futuro muy exitoso tu quieres ser actriz… no actriz no… modelo!! Estoy en lo cierto – Cristina asintio – Muy bien vas a ser triunfar en lo que quieras, vas a tener una vida feliz… y vas a encontrar el amor!!
-Puede ver quien es – le pregunto Cristina exitada… la senora asintio con la cabeza
-Lo veo es un muchacho, que te va a ayudar mucho en tu carrera como modelo, posiblemente ya lo conoces… se llama… se llama…no se como se llama, su nombre… empieza por “A”
-Alex!!? – le pregunto Cristina emocionandose aun mas, pero el rostro tranquilo de la senora se tenso y apreto mas sus ojos aun cerrados.
-No no es un Alex… perdon querida pero pobrias decirme tu nombre completo cuando no veo algo en tus manos recurro a la numerologia
-Por supuesto… Cristina Carolina Torres Rodriguez
-Fecha de nacimiento?
-27 de febrero 1993 - La cara de Cristina se habia entristecido un poco luego de que Madam Berut le habia dicho que el amor de su vida no era Alex asi que hablaba con un tono mas apagado que nunca le habia escuchado.
-Tu amas a esa persona… pero aun no lo sabes, tu subconciente piensa en el como algo mas que un simple amigo pero tu no lo notas… - en ese momento mi mente viajo directamente a Armando… podria ser el tenia que preguntarselo?
-Espere… - la interrumpi – ese muchacho se llama Armando?… su nombre es Armando?
- La senora sonrio, y asintio con la cabeza – Ese es el nombre… Te ama carino, te ama pero en secreto - luego abrio sus ojos muy pasivamente para descubrir a Cristina que la miraba horrorizada por su respuesta, la anciana se rio al verla – Veo por tu rostro que no te ha gustado mi respuesta.
-No yo… necesito sentarme
-Estas sentada carino – le respondio la senora aun manteniendo su calida sonrisa
-Dios no puedo creerlo… Armando
-Calmate si – intente tranquilizarla – quiza es otro Armando
-Es el unico Armando que conozco -Carino tranquilizate – le hablo la senora – Las cosas sucederan a su tiempo si mientras tanto disfrutas tus momentos de felicidad con tu actual pareja, ya el destino se encargara de ver que sucede entre tu y Armando mientras tanto no le prestes mucha atencion ...